La fertilidad de la mujer puede verse afectada por varios factores, desde el estrés y la contaminación, hasta por la falta de una dieta sana y equilibrada.
¿En qué consiste la dieta mediterránea?
La conocida y reconocida por la UNESCO como dieta mediterránea, incluye los alimentos básicos que debe incluir cualquier dieta sana, como son el aceite de oliva, los cereales, las frutas y verduras frescas o secas, una proporción moderada de carne, pescado y productos lácteos, y abundantes condimentos y especias.
Con la gran variedad de alimentos que incluye la dieta mediterránea se pueden crear gran variedad de recetas y platos a nivel culinario, pero también a nivel preventivo de enfermedades del aparato circulatorio, de la obesidad, del colesterol, del estreñimiento e incluso de la fertilidad.
¿Por qué la dieta mediterránea favorece la fertilidad de la mujer?
La dieta mediterránea aporta bienestar y salud a nuestra forma de vida, y también favorece de gran forma, la posibilidad de conseguir una gestación, que en ocasiones se hace esperar hasta límites insospechados. ¿Y cómo la dieta mediterránea puede favorecer la fertilidad de la mujer? Este tipo de alimentación ayuda a reducir los problemas ovulatorios y mejora el desarrollo del embrión. Consumiendo una cantidad adecuada de vitaminas se obtendrán beneficios para los óvulos, el útero, el endometrio y la placenta, en el caso de una gestación.
La hipófisis, la tiroides, el ovario o los testículos, los testículos afectan a la fertilidad y necesitan unos niveles de vitaminas y minerales para su correcto funcionamiento.
Dieta mediterránea y fertilidad del hombre
En el caso de la fertilidad femenina, seguir la dieta mediterránea puede contribuir a una mejora en la calidad del esperma, ya que aporta unos niveles óptimos de antioxidantes, necesarios para la producción de espermatozoides, como las vitaminas E o C, los betacarotenos, el selenio, el zinc o el licopeno. También aporta ácidos grasos omega-3, fibra y vitamina D.
Consejos para llevar una dieta sana y equilibrada
Estudios recientes también han demostrado los beneficios de seguir la dieta mediterránea durante un tratamiento de reproducción asistida. Los beneficios de este tipo de alimentación sobre la fertilidad y el éxito del tratamiento son claros. Por tanto, recopilamos unos pequeños y fáciles consejos para construir tu plan de alimentación siguiendo la dieta mediterránea:
- Incluir gran cantidad de frutas, verduras y legumbres
- Consumir más pescado que carne
- Reducir el consumo de huevo
- El aceite de oliva debe ser la fuente principal de grasas
- Beber agua en cantidades abundantes, reduciendo o eliminando el alcohol y las bebidas azucaradas
- Consumir a diario lácteos y cereales, especialmente integrales estos últimos