En los últimos veinte años, el número de embarazos múltiples en nuestro país se ha duplicado, motivado, en gran parte, por el aumento en la edad de gestación de las mujeres. En 2018, la edad media de las madres primerizas era de 31 años. Estas mujeres, en muchas ocasiones, tienen que recurrir a la medicina reproductiva, en la que pocas veces se opta por la transferencia de un solo embrión, práctica de la que IVI es máximo defensor.
Siempre os hemos hablado de razones médicas, que las hay y muchas, para evitar los embarazos múltiples, pero hoy, y gracias a un informe elaborado conjuntamente con la consultora Deloitte, además podemos decir que la transferencia de un único embrión podría ahorrar al Estado más de 45 millones de euros de media al año.
Aumento en los embarazos gracias a la medicina reproductiva
Nuestro país presenta el porcentaje más alto de mujeres que son madres con 35 o más años, cifra que ha crecido en los últimos años. Este hecho implica necesitar la ayuda de la medicina reproductiva para concebir, lo que supone un incremento del 275% de embarazos mediante tratamientos de reproducción asistida en los últimos diez años. Por tanto, este tipo de embarazos representan un 8% del total, cinco veces más que una década atrás.
“Las prácticas de reproducción asistida actuales en España siguen apoyándose en la transferencia de más de un embrión a la vez para alcanzar la gestación –más del 50% de los ciclos en el sector privado y del 70% de los ciclos en el sector público–. La evidencia científica es clara respecto a este tema: los embarazos múltiples impactan negativamente en la salud de las madres, por ejemplo, con un riesgo hasta cinco veces más alto de preeclamsia; y en la de los recién nacidos, particularmente incrementando el riesgo de eventos de salud adversos como la probabilidad de bajo peso al nacer, prematuridad o patologías que puedan afectar a los diferentes órganos del bebé”, explica el doctor Antonio Requena, director médico de IVI.
Transferencia de un solo embrión
El Dr. Requena añade: “ante esta situación, se pueden tomar acciones para limitar los riesgos de salud para las madres, los recién nacidos y sus familias, empezando por un cambio en las prácticas de reproducción asistida. Como ejemplo, se podría fomentar la transferencia de un único embrión que, además de reducir el número de embarazos múltiples y los riesgos de salud asociados, podría ahorrar al estado más de 45 millones de euros de media al año”.
Las mujeres y parejas con problemas reproductivos confían en la creencia de que mediante la transferencia de más de un embrión tendrán más posibilidades de embarazo. Pero la realidad, publicada en varios estudios, es que no hay diferencias significativas en la tasa de gestación acumulada con un solo embrión en comparación con la lograda en la transferencia de dos, tanto en ciclos con gametos propios como donados.
El porqué de la transferencia de un solo embrión
Lo que comenta el Dr. Requena es una de las conclusiones más importantes que se recogen en un informe, publicado recientemente, realizado por IVI junto con la consultora Deloitte. Es el primer estudio sobre “El coste público de los embarazos múltiples en España”, una investigación precursora en España, en la que se pone de manifiesto la implicación de IVI en la seguridad del paciente y su bienestar en la sociedad.
La transferencia de un solo embrión podría reducir el número de embarazos múltiples en hasta 3.400, o un 50%, disminuyendo, por ejemplo:
- 500 abortos espontáneos, muertes fetales y muertes neonatales
- 400 cesáreas
- 500 nacimientos prematuros
- 700 ingresos neonatales
“Este informe explora la evolución de los embarazos múltiples en España y cuantifica el coste público asociado a estos respecto a los embarazos sencillos. Esto hace posible evaluar los beneficios netos que resultarían de cambios en las prácticas de reproducción asistida –entre ellos, reducir tanto los riesgos de salud que afectan a las madres y familias, como el gasto público que repercute en el estado de bienestar español–“, añade el doctor Antonio Requena.
Riesgos de transferir más de un embrión
Tal y como muestra este estudio, dichos riesgos para la salud conllevan que las familias sufren embarazos más difíciles, también durante el parto y el posparto. El informe concluye que, desde la gestación hasta los tres años de vida de los bebés, estas familias necesitarán 600 horas extras –lo que equivale a más de 75 días laborales o un tercio del año laboral– en contacto con el Sistema Nacional de Salud y en su hogar, cuidando de los recién nacidos con problemas de salud.
Este alto riesgo de salud por los embarazos múltiples también conlleva una mayor asistencia médica y prestaciones sociales, que se puede traducir en un coste público 2,5 veces mayor o más de 14.300€ adicionales por parto múltiple respecto a los partos sencillos.
Reducción en un 75% de los embarazos múltiples en IVI
La apuesta firme de IVI por la reducción de los embarazos múltiples ya es una realidad en nuestras clínicas en las que, en la actualidad, en más del 90% de los casos se realiza la transferencia de un único embrión (SET, por sus siglas en inglés). En los últimos diez años hemos logrado reducir este tipo de embarazos en un 75%, aumentando las posibilidades de embarazo a término de un bebé sano.
A esta cifra se suma la tasa actual de gemelos, que apenas llega al 4%, al mismo nivel de la tasa nacional de gemelos concebidos de manera natural, que es del 2,4%, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
“El por qué se ha podido implementar esta estrategia para casi el 100% de nuestros tratamientos se debe a que conocemos los mejores mecanismos que regulan la receptividad endometrial, a técnicas como la del Timelapse, que permiten ver la evolución del embrión, o a mejoras en la selección embrionaria gracias al diagnóstico genético pre-implantacional, para descartar aquellos embriones con anomalías cromosómicas. Todo ello complementado por la labor educativa tanto de los profesionales médicos como de la población para que se entienda que la gestación múltiple no es un objetivo a lograr, sino una complicación a evitar”, concluye el Dr. Requena.
Los comentarios están cerrados.