- En el estudio se ha analizado una muestra de 485 pacientes entre operadas de endometriosis (232) y no operadas (253) que preservaron su fertilidad
- La principal conclusión muestra que las mujeres con endometriosis no operadas obtuvieron más óvulos tras la estimulación
- Según los resultados, las pacientes no operadas muestran una tasa de recién nacidos vivos del 70%, mientras que en las que han pasado por un proceso quirúrgico, la tasa es ligeramente inferior al 50%
VALENCIA, 28 DE NOVIEMBRE DE 2019
La endometriosis es considerada aún hoy como una gran desconocida, una enfermedad que muchas mujeres sufren en silencio y sin saberlo. Esta dolencia afecta a 1 de cada 10 mujeres y, actualmente, todavía no tiene cura. Solo en España, 2 millones de mujeres la sufren a diario.
Ante esta realidad, la Dra. Ana Cobo, directora de la Unidad de Criobiología de IVI Valencia, lidera un estudio que responde a una de las principales cuestiones en torno al tratamiento de la endometriosis y sus efectos sobre la fertilidad: determinar si los casos en los que acude a consulta una paciente joven, en este caso menor de 35 años, con endometriosis, se debe operar o no, o si por el contrario es preferible preservar su fertilidad para obtener los mejores resultados reproductivos.
Según muestran los datos analizados, las mujeres menores de 35 años que preservaron su fertilidad diagnosticas de endometriosis y que no han sido operadas obtienen más óvulos que las operadas, y los resultados, tanto de supervivencia como resultados clínicos y tasa de embarazo, son más altos que si están operadas. En este caso, la tasa de recién nacidos vivos en las pacientes jóvenes no operadas está cerca del 70%, mientras que, en el caso de las que han sido sometidas a una cirugía, está cerca del 50%.
“Ahora sabemos a ciencia cierta que la preservación de la fertilidad es efectiva en pacientes con endometriosis porque asegura una capacidad reproductiva en una enfermedad que tiene un carácter progresivo, por lo que podemos afirmar que es recomendable primero preservar y luego operar, en los casos en los que la cirugía esté indicada”, matiza la Dra. Cobo.
Este es el primer estudio realizado en el mundo sobre preservación por motivo de endometriosis en el que, además, se publican datos objetivos sobre la incidencia de la preservación de la fertilidad en pacientes diagnosticadas de endometriosis.
“Desde hace tiempo hay dudas en la comunidad científica no resueltas sobre este tema. Se sabe que la calidad ovocitaria se puede ver afectada en los casos de endometriosis, pero existía la duda sobre si la vitrificación es un factor que podría afectar todavía más a los ovocitos”, añade el Dr. Juan Antonio García-Velasco, director de IVI Madrid y co-autor del estudio.
Los resultados del estudio, analizadas 485 muestras de pacientes de las clínicas IVI en España con una edad media de 35,7 años, presentan datos determinantes en este sentido y abren una vía futura para todas las pacientes afectadas por endometriosis.
Para el presente trabajo, llevado a cabo de forma retrospectiva, se ha evaluado a las pacientes que han pasado por un proceso quirúrgico comparándolas con las que no lo hicieron, para segmentar, posteriormente, por grupos de edad, divididos en menores y mayores de 35 años.
“Las causas de la endometriosis siguen siendo una incógnita, por lo que no existe un tratamiento curativo y, hasta hoy, la única solución posible es la cirugía en los casos en que la enfermedad se presenta de forma más aguda, aunque esto no garantiza que no se reproduzca en el futuro. Cuando hablamos de endometriosis debemos saber que se trata de una enfermedad crónica que afecta a la capacidad reproductiva de la mujer, de ahí la importancia de este estudio, para comprender si la preservación de la fertilidad puede ser una solución para garantizar que las mujeres que la padecen y no deseen quedarse embarazadas en ese momento, puedan tener las mismas posibilidades futuras”, explica el Dr. García-Velasco.
La característica clínica más relevante de la endometriosis es el dolor, de intensidad variable, que puede llegar a ser muy importante y afectar seriamente a la calidad de vida de la mujer. El dolor se produce fundamentalmente durante la menstruación y, durante o después, de las relaciones sexuales. Además, la endometriosis puede afectar a la fertilidad de la mujer y se estima que el 40% de las mujeres con endometriosis son infértiles.