- La resistencia a la insulina podría estar relacionada con los abortos recurrentes, una situación que afecta aproximadamente al 2-5% de las mujeres en edad reproductiva
- Otro de los estudios evalúa la presencia de una familia de proteínas que protege a los telómeros, evitando su acortamiento y, por ende, su envejecimiento prematuro. Estos hallazgos podrían ayudar a definir tratamientos que prevengan o incluso reviertan el envejecimiento ovárico
VANCOUVER, 15 DE MARZO DE 2024
Como cada año, investigadores de todo el mundo se dan cita estos días en el Congreso de la Sociedad para la Investigación Reproductiva (SRI, por sus siglas en inglés), celebrado este año en Vancouver (Canadá), para exponer los últimos avances en investigación que ayudarán a mejorar el escenario reproductivo de las mujeres y parejas que precisen de la reproducción asistida para cumplir su deseo gestacional.
Entre ellos se encuentra el estudio “Metformin treatment decreases clinical miscarriage and improves live birth rates in infertile patients with insulin resistance”, que demuestra cómo el tratamiento con metformina disminuye las tasas de aborto clínico y mejora las de bebés nacidos en mujeres en procesos de reproducción asistida con resistencia a la insulina.
“El desequilibrio de la resistencia a la insulina durante la implantación del embrión y el embarazo provoca niveles elevados de glucosa en sangre materna y fetal, lo que da lugar a complicaciones que pueden desembocar en un aborto espontáneo. El uso de metformina ha sido descrito como un tratamiento que conduce a una disminución de los niveles de glucosa en sangre sin riesgos asociados, además de mejorar la función del endometrio, situándose como posible tratamiento para mujeres en las que la resistencia a la insulina es un factor importante que podría estar relacionado con peores resultados reproductivos. En este sentido, nosotros evaluamos el efecto de la metformina sobre los resultados reproductivos de estas mujeres”, explica la doctora Hortensia Ferrero, investigadora de la Fundación IVI y autora de este estudio.
Y es que, la pérdida recurrente de embarazo afecta aproximadamente al 2-5% de mujeres en edad reproductiva. Aunque se han descrito otros trastornos, como anomalías cromosómicas y uterinas, desequilibrios endocrinos, factores autoinmunes, complicaciones obstétricas y anomalías metabólicas como posibles causas de la pérdida de embarazo, estudios previos han demostrado que la resistencia a la insulina puede desempeñar un papel importante en la disfunción reproductiva femenina.
“Tanto es así que hemos observado un aumento de las tasas de aborto clínico espontáneo en las mujeres con resistencia a insulina. Probablemente debido a que hay un deterioro en la captación celular de glucosa debido a la resistencia a insulina que conduce a una nutrición embrionaria inadecuada y a una deficiencia energética que culmina en la pérdida del embarazo. Esta tasa de aborto clínico aumentada en mujeres con resistencia a insulina se redujo significativamente en aquellas que fueron tratadas con metformina, en comparación con las que no recibieron el tratamiento. Además, hemos comprobado un aumento de la tasa de bebés nacidos en estas pacientes con resistencia a insulina y tratamiento con metformina en comparación con las que no lo tomaron, incluso comparado entre pacientes sin resistencia a la insulina”, apunta la Dra. Ferrero.
Revertir el envejecimiento ovárico mediante el estudio de los telómeros y su longitud
Aunque no puede evitar el envejecimiento, la ciencia avanza en la manera de prevenirlo e incluso revertirlo. Esta es la línea en la que actúa el estudio titulado “Telomere protection is impaired in the ovary of SAMP8 mouse model with reproductive senescence”, que señala hacia el acortamiento de los telómeros como signo de envejecimiento de los ovarios.
“Los telómeros son un gran marcador para evaluar el envejecimiento. En este sentido, hemos visto que existe una familia de proteínas -las shelterinas- que protegen y ‘cuidan’ estos telómeros. En concreto, la TRF 1 es una de las más relevantes. Así, hemos estudiado si estas proteínas protectoras están alteradas en los ovarios de un modelo de ratón que envejece prematuramente (SAMP8), comprobando, efectivamente, que los ratones que envejecen prematuramente tienen menos TRF1 en sus ovarios, y en concreto, en sus folículos. Esto puede causar que los telómeros se acorten antes de tiempo y, en consecuencia, envejezcan antes”, señala el doctor Juan Antonio García Velasco, director científico de IVI, codirector de IVI Madrid y autor de este estudio.
Esta posible alteración puede generar una inadecuada protección de los telómeros, por lo que entender los mecanismos que la producen puede ayudar a definir tratamientos que prevengan o incluso reviertan el envejecimiento reproductivo.
En total, son cerca de una veintena los trabajos que IVI ha presentado en este encuentro científico, abordando temáticas de gran interés científico como los disruptores endocrinos y su efecto sobre la fertilidad, ovarios poliquísticos o células madre, además de los ya comentados.