Ya quedan poquitos días de verano pero para aquellas que aún tengan vacaciones, os dejamos algunas recomendaciones:
¿Es desaconsejable tomar el sol?, ¿puede darme el sol en la barriga durante los últimos meses del embarazo?
En general no hay ningún problema con la exposición al sol pero hay que tener en cuenta algunas precauciones:
- El cloasma o “paño facial de embarazada” como popularmente es conocido supone una hiperpigmentación de la piel en zonas de exposición solar debido al aumento hormonal. Por eso, aunque siempre es importante llevar una alta protección facial, durante el embarazo es obligatorio si no se quiere dejar la cara cubierta de manchas oscuras para siempre.
- Las cremas solares suelen ser compatibles con el embarazo pero se debe preguntar al farmacéutico la composición por si algún factor de la crema pudiera absorberse a través de la piel y afectar al feto, como cualquier medicación tópica.
- En el primer trimestre la hipertermia (aumento de la temperatura corporal materna), especialmente en el abdomen, puede generar malformaciones fetales, por eso hay que evitar en el aseo personal bañarse en agua muy caliente y una exposición solar prolongada en horarios de máxima temperatura. Así mismo, la fiebre elevada en caso de infección debe tratarse inmediatamente con antitérmicos.
¿Puedo bañarme en la piscina, y en el mar?
Tomar el baño no supone ningún riesgo en caso de llevar un embarazo normal ya que el tapón mucoso que se forma en el cuello uterino cuando la mujer se queda embarazada evita las infecciones del feto por la subida de gérmenes, sin embargo en determinadas situaciones está desaconsejado: si tiene rotura de la bolsa de las aguas, por acortamiento del cuello del útero, en caso de sangrado genital, o por infecciones genitales de repetición.
¿Cómo me puede afectar el calor y la humedad?
Las condiciones de humedad local-genital provocadas por una mayor sudoración y por el uso prolongado de bañadores mojados pueden incrementar el riesgo de hongos vaginales, que ya de por sí es mayor durante el embarazo, por lo que es necesario llevar ropa interior que transpire y cambiarse la ropa húmeda con frecuencia.
¿Puedo comer y beber de todo?
Con la llegada del calor aumenta la ingesta de bebidas calóricas y de alimentos con elevado contenido en hidratos de carbono (helados, granizados) que provocan un aumento de peso que puede ser peligroso en mujeres con factores de riesgo como diabetes gestacional, hipertensión y obesidad. Además, el consumo de bebidas alcohólicas frías (cerveza, sangría, vino…) está desaconsejada porque se desconoce cual es la dosis a partir de la cual puede ser tóxica para el feto.
¿Es peligroso viajar en avión o hacer trayectos largos en coche?
Hasta el séptimo mes, si se ha llevado un embarazo normal, se puede disfrutar de los viajes en avión sin olvidar que en vuelos de más de tres horas es necesario mover las piernas para no incrementar el riesgo de trombosis, y lo mismo ocurre con viajes largos en coche. Ahora bien, los dos últimos meses de embarazo no es aconsejable viajar en avión por la posibilidad de parto prematuro, y además muchas compañías aéreas a partir del octavo mes de embarazo exigen un certificado médico para poder volar.
Con todo, hay que tener claro que el embarazo no es una enfermedad, si no un estado natural del cuerpo que únicamente requiere de unos determinados cuidados extra que no tienen por qué limitar nuestras actividades vacacionales.
Dr. José Bellver
Instituto Valenciano de Infertilidad