“Me emociona pensar que estoy ayudando a otras mujeres”

“Me emociona pensar que estoy ayudando a otras mujeres”

Conversaciones

Este es el sentimiento de muchas mujeres que han decidido dar el paso de ser donantes de óvulos. Un hecho, un gesto, que a ellas les supone un esfuerzo físico mínimo pero una gran satisfacción personal al pensar que con su generosidad están permitiendo que otras mujeres puedan ver cumplido su sueño de ser madres. Mayor aún es la alegría de las receptoras. Mujeres que tienen que pasar por un largo y duro camino para buscar la maternidad y que, al final, después de ver que no lo consiguen, tienen una última esperanza de lograrlo gracias a la ovodonación. Tan fácil y complicado a la vez, tan bonito, como mujeres ayudando a mujeres.
Estas son las historias de mujeres como Patricia, paciente IVI de donación de óvulos, y Lourdes, mamá gracias a una ovodonación, que en este Conversaciones IVI nos cuentan su experiencia en el camino de la donación de óvulos, que cada una recorre en una dirección, pero en el que ambas sonríen al llegar a la meta.

Lourdes, la feliz mamá, nos cuenta el duro golpe de recibir un resultado negativo de la beta y cómo después tuvo que dar el paso de decidir que tenía que recurrir a la donación de óvulos para poder quedarse embarazada. Un proceso largo, durante mucho tiempo, en el que tuvo que sacar fuerzas y esperanzas de donde no sabía que las tenía, pero que ahora se emociona al recordar que el final de ese camino fue el contrario de cómo había empezado: una beta positiva. Resalta el papel tan fundamental de su entorno, su familia y amigos, que nunca la dejaron sola y la arroparon en todo el proceso. Nos lo cuenta en este Conversaciones IVI y a pesar de lo duro que fue, hoy sonríe porque lo logró y tiene a su niña entre sus brazos, la pequeña Carmen. Como ella misma dice, el deseo de ser madre es de las cosas más fuertes que hay y hasta que no se consigue no se para. Porque las mujeres que quieren ser madres y encuentran dificultades para conseguirlo son el ejemplo perfecto de fuerza y valentía.

En el lado contrario Patricia, una donante de óvulos en IVI que comparte con nosotros porqué lo hizo. Relata que es un proceso muy sencillo pero que, solo con imaginarse la felicidad que le puede reportar a mujeres como Lourdes, todo vale la pena. Se alegra y se emociona al pensar que está ayudando a otras personas a que cumplan su deseo de ser mamás. Para todos es gratificante a ayudar a otras personas: desde el gesto más pequeño hasta algo tan importante como la historia que nos están contando.



Volver arribaarrow_drop_up